Texas extendió el plazo para que las familias de bajos ingresos soliciten un subsidio único para alimentos en sustitución de las comidas escolares gratuitas o a precio reducido que los niños no están recibiendo durante la crisis de coronavirus.
Este mes, el programa Transferencia Electrónica de Subsidios por Pandemia, conocido como P-EBT, empezó a ayudar a las familias con niños que han perdido temporalmente el acceso al Programa Nacional de Comidas Escolares debido al cierre de escuelas por la pandemia.
El lunes, el gobernador Greg Abbott y el comisionado ejecutivo adjunto de la Comisión de Salud y Servicios Humanos, Wayne Salter, anunciaron que el plazo, que vencía este mes, será extendido hasta el 31 de julio.
«La extensión del plazo de P-EBT hará posible que los texanos tengan tiempo para inscribirse a este programa y llevar comida nutritiva a sus familias mientras el estado continúa combatiendo covid-19», dijo Abbott en un comunicado.
Se estima que hasta 3.6 millones de niños de bajos recursos cumplen los requisitos para recibir este apoyo único de $285 por niño.
Las familias de los niños pueden gastar los créditos —$1,000 millones pagados por el gobierno federal— en las tiendas de abarrotes con sus tarjetas de beneficios electrónicos, comúnmente llamadas Lone Star Cards.